Varios edificios de las universidades públicas están ad portas de derrumbarse. Mientras el Gobierno anuncia millonarias inversiones para nuevas cárceles, no hay dinero para las aulas de los estudiantes.
Construye una universidad hoy y evitarás dos cárceles en el futuro. Hace pocos días el ministro de Justicia, Juan Carlos Esguerra, anunció la construcción en el país de nuevas cárceles por $1 billón. Una noticia buena en la medida en que busca reducir el hacinamiento en esos sitios, pero contrasta con el estado actual de la infraestructura de las universidades públicas, donde se forjan los colombianos del futuro y se reduce el riesgo de que esos mismos ciudadanos terminen en la delincuencia.
Edificios derruidos, muros a punto de desplomarse y miles de estudiantes en peligro encontró Dinero en una visita a las instalaciones de las universidades Nacional, de Antioquia y del Valle. Entre las tres sedes se requieren unos $2 billones para el reforzamiento sísmico y evitar una tragedia.
“Hay unos edificios que están en alto riesgo. Según la ley actual, todas las sedes públicas deben cumplir con normas mínimas de reforzamiento antisísmico, pero no hay una ley que nos garantice los recursos. La mayoría de edificios de la Universidad fueron construidos hace décadas y hay que construir nuevas edificaciones. Tres facultades deben ser demolidas con urgencia: Artes, Enfermería y Arquitectura”, explicó a Dinero el nuevo rector de la Nacional, Ignacio Mantilla.
Por su parte, la Universidad de Antioquia necesita $450.000 millones para mejorar la infraestructura de las sedes cuyos edificios en su mayoría fueron construidos hace décadas.
En el caso de la Universidad del Valle, la situación es delicada por cuanto Cali está ubicada en una zona de alta incidencia sísmica. “Acabamos de terminar un estudio a los 90 edificios de la Universidad y encontramos que 35% tienen una situación muy complicada; es decir, tienen un riesgo alto”, explica el jefe de la Unidad de Planeación de la Universidad, Juan Carlos Castillo. En este campus se requieren $500.000 millones.
Las tres universidades públicas analizadas suman unos 100.000 estudiantes, la misma población de las cárceles en Colombia. Llegó la hora de invertir en una buena educación pública.
Fuente: Dinero.com
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